¡Vaya, vaya cómo cambian las cosas cuando se ven ‘las orejas al lobo’!.
Pasamos de «Los Pimpinela» a «Los Picapiedra».
¿Podrá dormir tranquilo Pedro ahora, AHORA SÍ?
¡Qué Dios nos coja confesados!
Rincones Paradisíacos y Únicos de la isla de MENORCA